Continúo con el tema sobre los ejecutivos de las trans -nacionales y sus responsabilidades en todo este tinglado de la crisis economico-financiera mundial.
Antes de destapar los agujeros y marros armados, seguramente estos sujetos habrán salvado lo suyo en cualquiera de esos paraísos fiscales como Liechtenstein, Suiza, Jersey o Islas Caimán; también se habrán desecho de los paquetes accionariales de las compañías que eran conocedores del poco valor que tenían. Cuando lo han tenido todo a buen recaudo, llaman a sus amiguetes – acaso subalternos- colocados en los gobiernos de los distintos países para que éstos se las ingenien, cómo puedan, para sacarnos a todos del desaguisado en que nos han metido. Mientras ellos, los hacedores se quedan tan ufanos y ramplantes en sus respectivas poltronas.¡Qué barbaridad !
Llegados a este punto, me viene a la memoria otra de mis lecturas, La compra de la república, de “Gog”, de Papini. El comportamiento inexplicable de los diferentes gobiernos del mundo con sus ayudas incondicionales a los banqueros y financieros, acaso nos están demostrando la verdad que la ficción del universal escritor italiano nos anticipaba.
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